Hola
Lo que os enseño hoy, no lo hice yo pero supervisé en todo momento el procedimiento.
Esta caja se la hizo Maribel a su peque (ya no es tan "peque" pero como es la menor de sus dos hijas, pues será la peque aunque tenga 80 años!!)
Esta caja se la hizo Maribel a su peque (ya no es tan "peque" pero como es la menor de sus dos hijas, pues será la peque aunque tenga 80 años!!)
Se vino a casa con su caja y se marchó, ya casi de noche, con toda una CAJA con mayúsculas. La verdad es que pasamos una buena tarde de solecito "manualideando" en el jardín.
Primero lijamos mucho. La caja no tenía mala madera pero nunca me canso de insistir que el buen acabado de un trabajo depende de un buen principio. A Maribel "no le va lo de la lija" Cuando hacemos algo juntas siempre me regatea: "ya está, ¿no?" Y yo: "un poquito más, anda, que es importante para que el acabado sea fino..." Y dos segundos después: "ya está, vale?" Y yo: "ha de valeeer!!"
Después le dimos un par de manos de un vede muy parecido al de los arbustos del dibujo del papel.
Cerramos bien el poro con un suave lijado fino (otra vez, si!) y le frotamos una vela por algunos lugares (cantos, vetas de los lados). Es una vieja técnica que se usa para facilitar la tarea de desgastar... No sé si os la he explicado alguna vez... Se trata de frotar con una vela las zonas por donde queremos que el segundo color no se fije. Cuando terminamos de frotar la vela, retiramos los trocitos que hayan quedado en la caja y aplicamos el segundo color. En ese caso blanco "roto".
Cuando el blanco está seco al tacto (nos damos cuenta porque la pintura ya no brilla) se frota con un poco de esparto o con una lija muy finita y va saliendo el color verde. Esto es a gusto "del consumidor" Cuanto más frotéis más verde, en este caso, será la caja. No lo dejéis secar muchas horas la pintura porque será más costoso el trabajo de desgastar.
Después en la tapa pusimos este papel del pueblecito que me gusta un montón. Ya os enseñaré una bandeja que hice también con ese papel.
Y ya está!! La protegimos con barniz satinado en spray.
Como se echaba la noche encima se fue con la caja húmeda... pero me gusta terminar los trabajos con una mano de cera para que queden muuuy suaves.
Cuando el blanco está seco al tacto (nos damos cuenta porque la pintura ya no brilla) se frota con un poco de esparto o con una lija muy finita y va saliendo el color verde. Esto es a gusto "del consumidor" Cuanto más frotéis más verde, en este caso, será la caja. No lo dejéis secar muchas horas la pintura porque será más costoso el trabajo de desgastar.
Después en la tapa pusimos este papel del pueblecito que me gusta un montón. Ya os enseñaré una bandeja que hice también con ese papel.
Y ya está!! La protegimos con barniz satinado en spray.
Como se echaba la noche encima se fue con la caja húmeda... pero me gusta terminar los trabajos con una mano de cera para que queden muuuy suaves.
A Gaby ya le había hecho yo otra caja que os enseñaré cualquier día, pero esta se la hizo su mamá así que seguro que quedó encantada!!
Espero que os haya gustado.
Un besito!!
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